De vuelta al mundo I

Miras de nuevo la jeringa,... le quitas el protector de la aguja y la clavas en tu brazo.
Tus piernas flojean haciendote caer de rodillas, te arde el brazo... y de pronto, todo el dolor desaparece.
Te levantas de un salto, te encuentras genial. "De estos quiero mas yo..." - te comentas a ti mismo mientras dejas la jeringa de nuevo en la mesa.
Un saco de viaje tirado al lado de la puerta parece que te muestra el siguiente paso a tomar. Coges el saco y lo abres. Ves dentro una especie de peto de un material bastante duro, tambien hay una caja pequeña que al abrirla te sorprende con 4 jeringas y 8 viales con liquidos.
Guardas la caja, te pones el peto bajo la camista y te echas el saco al hombro. ¿Y ahora que?
Sales a la calle, y te encuentras en un pequeño pueblo, que por lo que parece esta en mitad de la nada.
No ves a nadie por las calles polvorientas, asi que comienzas a andar con la esperanza de poder ver algo o alguien "familiar".
Bajo uno de los porches de las casas, un hombre descansa tumbado en un par de sillas.
Parece bastante mayor, aunque el gran sombrero que lleva no te deja ver su cara.

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